Fuego consume Restaurante Lumaka y 17 negocios más en Boca Chica

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Andrés, Boca Chica.- Una comisión de técnicos de los bomberos de Boca Chica, con el apoyo de miembros de la Defensa Civil, investigan las causas del incendio que destruyó totalmente la Plaza del Pescado, integrada por 17 negocios y el restaurant típico-turístico Lumaka.

Hoy Digital |

La Plaza del Pescado y el restaurante Lumaka, que operan en la Avenida Caracol, a pocos metros de la playa, resultaron totalmente destruidos durante el siniestro, provocando pérdidas millonarias y afectando a más de cien familias que dependían de los negocios.

Se informó que desde anoche, los técnicos de los bomberos y Defensa Civil, proceden al levantamiento de los escombros, en busca de obtener indicios y detalles de las causas que provocaron el incendio que se extendió por más de cuatro hora.

Algunos de los dueños de los establecimientos que se encontraban allí, dijeron que supuestamente el desprendimiento de un cable eléctrico habría sido la causa del fuego. Ninguna persona resulto lesionada.

«Estamos procediendo al levantamiento de los escombros primero, para luego iniciar las investigaciones técnicas que puedan ayudarlos a determinar las causas del siniestro», expresaron oficiales de los bomberos de Boca Chica, auxiliados por miembros de la Defensa Civil.

En principio algunos medios de comunicación digital, habían informado que las llamas también habían afectado la sucursal del Banco de Reservas ubicada justamente a pocos metros de la plaza, pero la versión fue negada por ejecutivos de la institución.

De la Plaza del Pescado, dependían decenas de familias que llevaban años en el lugar, mientras que de acuerdo a los informes, más de sesenta personas laboraban en el restaurante turístico Lumak, lo que ha sido calificado como »una calamidad».

Muchas personas que estaban en la escena de la tragedia, así como propietarios de los negocios destruidos, manifestaron que la falta de equipos que afecta a los bomberos de Boca Chica, provocó que el fuego se propagara rápidamente.

»Tan pronto el incendio comenzó, nosotros llamamos a los bomberos y vinieron dos camiones, pero por ironía de la vida, no tenían agua para sofocarlo».

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